Las experiencias de la Ruta de las Montañas de Agua son diseñadas por operadores locales de Choachí y Ubaque, con un enfoque sostenible y destacando el agua como elemento común.
Las propuestas turísticas de la región de Oriente se agrupan en tres ejes: naturaleza y aventura, cultura y gastronomía, y turismo agropecuario.
Esta región goza de un privilegio único al encontrarse entre los páramos de Cruz Verde y Chingaza, imponentes fábricas naturales de agua, cubiertas por especies vegetales como el musgo y los frailejones, que actúan como esponjas, alimentando las preciosas quebradas y ríos de nuestro territorio.
La excepcional biodiversidad de la zona es fruto de su ubicación, que abarca altitudes que van desde los 1.500 hasta los 3.800 metros. En este territorio convergen siete ecosistemas distintos, con temperaturas que oscilan entre los 0 y los 27 grados. Es hogar de especies animales únicas, como el Oso Andino, la comadreja, el borugo, el venado y más de 170 especies de aves.
A través de las cinco experiencias que se centran en este componente, los viajeros tienen la oportunidad de descubrir y maravillarse con esta rica biodiversidad, recorriendo rutas de senderismo de diversos niveles de dificultad y realizando actividades de escalada.
Aunque el componente natural es el más destacado, la identidad de este destino turístico refleja la profunda conexión entre la cultura, la gastronomía y la biodiversidad del territorio. La riqueza cultural, expresada tanto en la gastronomía tradicional como en propuestas innovadoras, evidencia cómo nuestra comunidad ha encontrado formas auténticas de habitar y proteger este espacio. En esta región, la biodiversidad es una parte integral de la vida diaria, y nuestra interacción con la naturaleza refleja el respeto y valor que le otorgamos.
A pesar de estar a solo una hora de Bogotá, Choachí y Ubaque conservan un carácter rural que preserva la paz, la armonía y las tradiciones heredadas de los ancestros Muyscas, a la par que se comprometen firmemente con la promoción de actividades sostenibles que favorezcan el bienestar de todos.
Las seis experiencias centradas en estos aspectos invitan al viajero a conocer la historia, las costumbres, las anécdotas y la arquitectura del casco urbano, además de disfrutar la experiencia de elaborar productos gastronómicos tradicionales con sus propias manos.
Aunque el turismo se está promoviendo desde una perspectiva sostenible, es importante destacar que aproximadamente el 85% de los habitantes de la región se dedican a las actividades agrícolas y pecuarias. Además, esta zona es una de las más relevantes para el suministro de alimentos orgánicos y cultivados con métodos sostenibles a Bogotá.
A través de las tres experiencias que giran en torno a este componente, los viajeros tienen la oportunidad de aprender y participar en procesos agrícolas que respetan y protegen el medio ambiente, al mismo tiempo que comparten las vivencias y costumbres propias de la vida campesina.